La investigación se inició a principio del mes de junio, ya que se tenía conocimiento de robos con intimidación cometidos en diferentes establecimientos comerciales, principalmente Farmacias, Gasolineras o supermercados.

Por este motivo se montó un despliegue policial formado por funcionarios, tanto de uniforme como de paisano, al objeto de recabar todos los datos posibles para la identificación y detención del autor o autores de los delitos.

Cotejadas las denuncias existentes, se pudo determinar que siempre se cometían los hechos en tres franjas horarias, coincidentes con la hora de menor afluencia de público en los diferentes establecimientos, entre las 08:00 y las 09:00; las 15:00 y las 16:00 y por la tarde noche, entre las 21:00 y las 22:00 horas, siendo estos los momentos en que menos público se encuentra en los establecimientos, y por tanto son menores las posibilidades de que alguien pudiera identificarlo.

El detenido accedía al establecimiento armado con un cuchillo de grandes dimensiones, con el que amenazaba a los empleados que en ese momento se encontrasen en el local, utilizando una gran violencia verbal hacía ellos, consiguiendo acercarse a la caja registradora y sustraer la recaudación.

Siempre se cubría la cara con alguna prenda de ropa, braga, pasamontañas o incluso una camiseta doblada, para evitar así ser identificado por algún cliente, los empleados o incluso las cámaras de seguridad que pudiesen existir en el establecimiento.

También usaba siempre guantes, que podían ser de látex o de lana, por lo que no dejaba ningún tipo de huella, no siendo tampoco posible su identificación por este medio. Una vez cometido el hecho delictivo, el detenido huía a pie y en alguna ocasión a bordo de un ciclomotor.

Una vez recabadas todas las pruebas, los Policías actuantes procedieron a la detención del presunto autor, practicando una entrada y registro en su domicilio, donde se recuperaron efectos procedentes de los robos, además de las prendas de ropa que llevaba puestas en alguno de los hechos.

Al detenido se le imputan cinco robos con violencia e intimidación cometidos en diferentes establecimientos. Una vez finalizadas las correspondientes diligencias, el detenido pasó a disposición de la Autoridad Judicial competente, quien decretó su inmediato ingreso en prisión.