Junto con las propuestas programáticas y las distintas aportaciones de colectivos y movimientos sociales, la candidata de Alternativa Alcalareña-Izquierda Unida ha fijado la posición de su movimiento político al afirmar que “no vamos a pactar ni con el PP, ni con PSOE, va a gobernar el pueblo y vamos a echar para siempre a los caciques”. Fernández se muestra confiada en alcanzar el apoyo mayoritario de sus vecinos  en la urnas y poder dirigir  “las ansias de cambio existentes en Alcalá a través de un equipo de Gobierno centrado en los problemas de la gente, que gobierne obedeciendo los mandatos del pueblo y que tome partido siempre por aquellos que más necesitan de su Ayuntamiento como poder público más cercano”.

Según explican, la aparición de un espacio de convergencia política representado en la suma de Alternativa Alcalareña e Izquierda Unida demuestra que “es posible aglutinar distintas sensibilidades que generen un cada vez mayor encuentro ciudadano, poniendo a trabajar la ilusión de muchos alcalareños por la transformación de su ciudad y dando paso a una nueva  política basada en la prioridad de las necesidades de la mayoría social y no en las mañas prácticas de Gobierno asentadas en el Ayuntamiento de Alcalá desde hace dos décadas”.

“Queremos establecer una alianza política ciudadana que se articule desde la movilización de todo vecino y vecina que quiera romper con las prácticas del bipartidismo, dando paso a la construcción de una política alternativa cuyos cimientos estén basados en la transparencia, la participación y la co-decisión en los principales ejes de trabajo diario”, afirma María Fernández. Se muestra convencida de que el “fracaso político liderado por el PSOE deja un legado de corrupción, promesas incumplidas y sufrimiento a nuestra ciudad que debe acabar mediante un cambio que convierta la movilización en organización y la organización en poder ciudadano, político y electoral”.