La ruptura del grupo de Alcalá Puede se hace aún más manifiesta de esta forma entre las dos concejales que ya no pertenecen a Podemos y los otros dos, Aticus Méndez y Pedro Nieto que siguen la disciplina de este partido.

En el pleno convocado para elegir al sustituto de Gutiérrez Limones en la alcaldía se realizó una votación por parte de los concejales sobre esta cuestión. Todos los portavoces de los grupos se propusieron como candidatos, por lo que por el grupo de Alcalá Puede lo hizo su portavoz y número uno en las listas, Jésica Garrote.

En la votación posterior todos los grupos votaron a su portavoz salvo Izquierda Unida que lo hizo por la Andalucista Lola Aquino y los dos ediles de Alcalá Puede, Méndez y Nieto que también votaron a la representante del PA. De esta forma cumplían con el planteamiento realizado desde hacía unas semanas en el que apostaban por plantear un gobierno alternativo al del PSOE con una persona de consenso a la cabeza.

De esta forma,  hubo dos concejales de Alcalá Puede que no votaron por la portavoz de su grupo. Esta circunstancia le ha valido a Jésica Garrote y Sheila Carvajal para argumentar  que se trata de un acto de transfuguismo  y pedir que se les aplique el Código de Conducta aprobado para estos casos por los partidos a nivel nacional.

Con esta petición han presentado un escrito de solicitud a la alcaldesa, Ana Isabel Jiménez, en el que le piden que dé la condición de tránsfugas a Áticus Méndez y Pedro Nieto.