Según explican esta acción además de hacer visibles los problemas de la zona es su respuesta a la retirada de la pancarta con el mismo lema que colocaron en la antigua comisaría y que fue sustraída una noche, un acto que califican como “incoherente e innecesario, que sólo ha servido para plasmar la realidad de esta ciudad, esconder los problemas en periodo electoral en lugar de solucionarlo de una vez por todas”. Aseguran que no van a amedrentarse  y que seguirán luchando “por la dignidad de Alcalá y su centro”.

Los vecinos explican que “no somos ningún partido, ni tenemos intereses partidistas, somos un grupo de vecinos hartos de que se nos ignore porque al ayuntamiento no le interesen nuestros problemas”.