Esta labor nace tras la preocupación mostrada por Cáritas de San Agustín a la cofradía, por la situación social del barrio.  Cáritas instaba a la corporación  a colaborar en la recogida de leche para paliar los efectos que la situación actual está provocando en diversas familias de la feligresía. Ante esta llamada, los costaleros de la Hermandad se pusieron manos a la obra y en pocos días lograron recoger más de 800 litros de leche.

Una vez dado este primer paso, los costaleros fueron más allá y pidieron colaboración a La Caixa, quien a través de su Fundación aprobó sufragar de manera íntegra todos los gastos que acarreara la apertura del comedor, esto es: menaje de cocina, leche, pan, aceite, mantequilla, zumos, galletas y fruta para el desayuno de los pequeños.

Por su parte, el Ayuntamiento ha puesto a disposición de la Hermandad las instalaciones del Colegio Federico García Lorca, ubicado en el barrio de Rabesa.

De esta forma, el  proyecto dará de desayunar a 80 niños de la feligresía en peligro de exclusión social, estando siempre bajo la supervisión de Cáritas parroquial.

Al acto de presentación y apertura del comedor  asistieron –de izquierda a derecha en la imagen- Marisa Fernández, directora del Área de negocio de La Caixa Alcalá-Carmona; Isabel Lucenilla, directora de la oficina de La Caixa La portada de Alcalá; Germán Terrón, hermano mayor de la Borriquita;  José Antonio Postigo, Director de Cáritas de San Agustín; y Mariló Gutiérrez, concejal delegada de Asuntos Sociales del Ayuntamiento.

En el momento de la entrega de la cantidad simbólica al hermano mayor, Marisa Fernández declaró que ésta ha sido la mayor partida económica realizada por la entidad, a lo que añadió: “No podíamos dejar de estar en este proyecto. Queremos seguir apoyando este tipo de acciones a través de la Fundación y podéis contar con nosotros para acciones futuras”.

Por su parte, el hermano mayor se mostró satisfecho por cómo se han desarrollado los prolegómenos del proyecto y quiso agradecer de antemano la ayuda que prestarán todos los voluntarios –principalmente hermanos de la Hermandad, amén de los pertenecientes a las cuadrillas de costaleros-, y también destacó la magnitud del proyecto, la cual  será la de mayor envergadura de cuantos proyectos solidarios ha ejecutado nuestra cofradía hasta la fecha.