El anhelo de los rocieros alcalareños se ha cumplido en la mañana de este lunes de Pentecostés, cuando la Virgen del Rocío en su procesión por la aldea almonteña ha visitado a los peregrinos de Alcalá y ha enfrentado su mirada con el Simpecado alcalareño. Mientras lanzadas al aire de la mañana sonaban las oraciones traídas desde Alcalá para la Virgen en la garganta de los alcalareños.