Opinión - 14/02/2018
"En juego un gobierno... y unas elecciones"
Autor:
Alberto Mallado

Aunque al final no llegue a concretarse, que todos los grupos de la oposición se hayan sentado para plantear una moción de censura contra el gobierno socialista tiene una enorme trascendencia política y marcará un antes y un después en la historia (añadamos política, para quitar solemnidad a la afirmación) de Alcalá.

Se trata de un tsunami político que marcará no sólo lo que queda de mandato, sino que será el factor determinante en las próximas elecciones municipales. Si sale adelante, entramos en territorio desconocido, cualquier cosa puede pasar. Ahí casi todo serían interrogantes. Si el gobierno de la oposición en apenas un año logra enjaretar medidas positivas para la ciudad ¿quién obtendrá rentabilidad del éxito? El PP parece que no, puesto que los concejales que estarán en el poder no irán en las listas electorales. El resto dependerá del balance que los ciudadanos hagan de la actuación personal de cada edil y de que luego sean capaces de ubicar a cada uno en el partido por el que se presenta. Porque en las próximas elecciones habrá un batiburrillo de siglas en clave local propicio para sembrar el desconcierto entre los votantes.

¿Y si la moción prospera y el gobierno en ese año y poco es un desastre? El PSOE será beneficiario. Un mal menor para ellos que habrán perdido el poder por un periodo corto de tiempo, para volver renacidos, reforzados  en algo que creen muchos alcalareños, que mejor o peor, el PSOE es la única opción de gobierno seria para la ciudad y si me apuran hasta con una militancia que despierta con coraje a la batalla después del adormecimiento que provocan las sucesivas victorias. Eso sí, a Ana Isabel le van a pedir cuentas en su partido por haber perdido Alcalá. Lo harán en los órganos territoriales del partido y también todo dentro de su agrupación local, donde cualquier resbalón de alcaldesa se saluda con un estruendo de aplausos y risas por una parte de la militancia.

Pero si hay algo evidente es que si después de haber llegado hasta aquí, al punto en el que muchos de los votantes de la oposición esperan con más o menos ansiedad la moción de censura, finalmente no alcanzan un acuerdo para ponerla en marcha, hay partidos y políticos que van quedar borrados del mapa o al menos reducidos a un papel testimonial.

Si la moción no prospera, esos partidos que ahora se reúnen no van a acabar bien entre ellos. Los que se empeñen hasta el final en llevarla a cabo van a ocuparse el año y poco queda hasta las elecciones a una única finalidad: señalar a los que no quisieron, dejar claro cuál fue la posición de cada uno. Y llegados al punto en el que estamos, no dar el paso, supone la muerte política. Si ahora alguno se echa atrás, irá  a las próximas elecciones con la etiqueta de “salvador del PSOE”, justo la contraria a la que hasta ahora han defendido, puesto que todos hicieron campaña con la máxima de que consideraban prioritario desalojar al PSOE del poder.

Así que en los próximos días los partidos políticos de Alcalá vivirán en riesgo de implosión. Está por ver a quien le estalla más cerca una bomba que a la manera de las antiguas cargas de artillería lleva escritas tres palabras: moción de censura.

© Guadaíra Información - 41500 Alcalá de Guadaíra (Sevilla) - España
Teléfono: 655 288 588 - Email: info@guadairainformacion.com � Aviso Legal