Al tranvía no le ha valido encontrarse al 80 por ciento de ejecución. Para retomar las obras de la carretera de Dos Hermanas, tampoco ha sido válido el argumento de ser la vía que conecta las dos principales ciudades de la provincia, después de la capital. En ninguno de los casos se ha tenido en cuenta que el estado de las obras a medio hacer provoca el deterioro de ambas, que cuando se retomen requerirán inversiones adicionales por el efecto del tiempo y el vandalismo.

La falta de inversiones en obras e infraestructuras es la tónica general del presupuesto de la Junta para el próximo año, tanto en la provincia de Sevilla, como en el conjunto de la comunidad autónoma. Según argumenta la administración autonómica, los recursos que hay se destinan al “blindaje del estado de bienestar”, en particular en lo que se refiere a sanidad, educación y prestaciones sociales.

El consejero de Justicia, Emilio Llera lo argumenta de otra forma, "no vamos a ser tan animales para hacer grandes inversiones cuando hay gente pasándolo tan mal. Antes que invertir en cualquier infraestructura nueva, tenemos que evitar a toda costa que haya hambre física en Andalucía", afirma.

El PP de Alcalá, ha mostrado su preocupación por la falta de inversiones en Alcalá. A su juicio, confirman que “Alcalá es la gran marginada para la Junta”. La consecuencia de ello, según los populares es que la ciudad seguirá “estrangulada y aislada” y con sus posibilidades de crecimiento cercenadas por la falta de infraestructuras, explican desde el PP. Pero además apuntan directamente a Gutiérrez Limones como responsable de la situación. La portavoz del PP, María del Carmen Rodríguez considera que las disputas internas en el PSOE protagonizadas por el alcalde alcalareño y la división interna existente en la agrupación local le han pasado factura en la elaboración de los presupuestos autonómicos. “Limones ya está amortizado, su propio partido sabe que está en un proceso acelerado de declive, y ya no apuestan por él”, manifiesta Rodríguez Hornillo.

Los populares aseguran sentirse “muy preocupados ante esta situación, ya que es más que evidente y a la vista de los presupuestos nos remitimos, que el final político del alcalde se acerca pero los ciudadanos alcalareños sufren las consecuencias”.