Las denuncias de los relevistas alcalareños, consisten en la falta de reconocimiento de su categoría profesional, la no conversión de sus contratos temporales en indefinidos a pesar de subir sus horas semanales del 75% inicial al 100% de la actualidad, como legalmente está establecido. Piden además el cese de los despidos, ya que entienden que las necesidades que cubren, siguen existiendo.

Dichos trabajadores municipales cuentan ya con sentencias judiciales a favor, donde se admiten sus contratos como indefinidos y sus terminaciones de contrato como despidos improcedentes. Además y dadas las necesidades del consistorio de seguir cubriendo sus puestos de trabajo, critican igualmente la actitud del gobierno de Limones de indemnizar y no readmitir a dichos empleados.

María Fernández, candidata a la alcaldía por Izquierda Unida y Alternativa, se ha reunido con una delegación de los trabajadores para conocer de cerca su situación, y ha declarado que “es indecente que una institución pública como el Ayuntamiento de Alcalá trate a sus trabajadores de forma caciquil y abusiva”. Así mismo, Fernández ha expresado que “es una falta de respeto hacia los trabajadores y un coste innecesario de dinero público llevar adelante un proceso judicial a sabiendas de que se terminará perdiendo y generando costas que tiene que asumir el consistorio, aparte del perjuicio que les supone a los trabajadores; un despido y la tardanza a poder cobrar lo que les pertenece”.

Fernández en nombre de Izquierda Unida y Alternativa ha mostrado su apoyo a dichos trabajadores y ha anunciado que IU llevará una moción al próximo pleno del ayuntamiento pidiendo que “cese esta actitud explotadora, y que se les reconozca a los trabajadores de relevo todos los derechos que la ley les otorga”.