El edificio tuvo un coste de construcción de 2.261.000 euros. Con la obra ya finalizada  llegó a realizarse en él un acto de toma de posesión de nuevos bomberos en época preelectoral pero de nuevo se cerró.

Los bomberos pusieron de relieve varias carencias del inmueble que no se incluyeron en el proyecto original, para cuya elaboración no se consultó a los que iban a usarlo. Por ello han sido necesarias nuevas obras por valor de 15.000 euros que ahora han finalizado.

El Centro de Emergencias, que ocupa una superficie de 4.000 metros en el polígono Cabeza Hermosa,  está llamado a convertirse según el Gobierno local en un “centro pionero en la provincia”, tanto por seguir el planteamiento de albergar a los organismos implicados en la gestión de las emergencias como por «ser un modelo en cuanto a nuevas tecnologías que permiten una mayor comodidad para los efectivos y una mayor eficacia en la aplicación de los servicios al ciudadano, contando con nuevas tecnologías y autonomía energética».

El edificio se distribuye en tres plantas, sótano incluido y alberga entre sus dependencias almacenes, una sala de guardia, comedor, aljibes, un gimnasio, salas de primeros auxilios, aulas de formación, aseos, dormitorios y espacios para las emisoras.