Una jornada maratoniana que ha estado dirigida por las maestras de Reiki de la localidad como Águila Márquez Catalán y Carmen Márquez Peralta, dos alcalareñas que vienen realizando un buen trabajo dentro de AFA, en su sede en el Callejón del Huerto donde todos los miércoles del año realizan sesiones, totalmente desinteresadas y abiertas a todos los públicos, desde los más pequeños hasta personas en avanzada edad.

Se trata de una vía curativa tan potente y eficaz cuando no “milagrosa” como propugnan sus practicantes. Este tipo de curas tan espectaculares quizá no sean las más frecuentes entre las personas que reciben sesiones de Reiki, pero lo cierto es que todos los maestros tienen alguna historia “milagrosa” que contar.  El Reiki se promociona como un método de imposición de manos para combatir el “estrés”, la ansiedad, el insomnio o la depresión.

Tal vez no sea una panacea pero según algunos estudios se ha  comprobado que es muy valioso, sobre todo para los postoperatorios graves, donde se han obtenido excelentes resultados en sesiones de grupo con enfermos. Sus efectos inmediatos y visibles en los pacientes son relajación muscular, mejora del sueño, disminución de ansiedad y mejora del estado de ánimo. Los expertos en la materia  destacan que, gracias a esta terapia, se puede aliviar el dolor crónico que genera, por ejemplo, la artritis, el reuma o la migraña. Asimismo, acelera la recuperación de lesiones, y ayuda a calmar el estrés y la ansiedad.